Japón es un país con una densidad de población de las más elevadas del mundo. Si consideramos además que más del 60% de este territorio corresponde a montañas y que apenas dispone de recursos (energéticos, mineros y superficie cultivable), podemos concluir que el país no ha tenido facilidades para desarrollarse económicamente. Sin embargo, la capacidad de trabajo y de organización de su población ha sido clave para que en la actualidad Japón sea una referencia económica y uno de los países más avanzados del mundo,mientras otros con muchos más recursos no han podido alcanzar su grado de bienestar y desarrollo. Este libro repasa los aspectos más destacables de la economía japonesa, las diferentes etapas de su desarrollo económico, desde el periodo Edo, caracterizado por el dominio de la familia Tokugawa, que instauró un largo periodo de paz pero también aisló Japón del resto del mundo, hasta nuestros días. Se abordan también los principales aspectos de su comercio exterior para acabar con un análisis de la estructura empresarial japonesa.