Las estrategias de gestión y control de la economía convencional tuvieron un origen y desarrollo en entornos más estables, en los que los cambios resultaban susceptibles de anticiparse, permitiendo un tiempo para planificar y controlar. En la nueva economía, basada en la información y en el conocimiento, el acelerado progreso tecnológico, combinado con un consumo masivo, genera una nueva sociedad que se sitúa en entornos abiertos de integración y globalización en los que las incertidumbres, las inestabilidades y los cambios ya no son susceptibles de gobernarse desde las estrategias de gestión y de control fundamentadas en modelos y técnicas que tuvieron su origen y desarrollo en principios científicos en los que el éxito aparecía asociado al orden, a la estabilidad y al equilibrio. En la nueva economía, la incertidumbre, las turbulencias, las inestabilidades y el no equilibrio, aunque carezcan de respuestas claras, tienen, sin embargo, que reconocerse, asumirse y gestionarse como fuerzas que estimulan la creatividad y la innovación. Se trata de una economía inmaterial en la que el poder pasa a depender más de la información, del conocimiento y de la innovación que de los medios de producción (capital y trabajo) de la economía material. La obra, después de analizar la evolución de la gestión y del control en relación con la evolución del proceso científico y los cambios del entorno, desde la economía industrial a la nueva economía de la información y de la complejidad, trata las nuevas estrategias de gestión y control en las que el futuro y el entorno ya no sólo se anticipan, sino que se crean. EL autor se adentra, también, en los procesos de integración y globalización, en los que aparecen simultáneamente procesos contradictorios: ascendentes, de integración y globalización, y descendentes, de descentralización y localización. Los modelos de gestión y control de la economía convencional se muestran insuficientes para gestionar estos procesos de expansión y contracción incorporando los valores de integración, aprendizaje complejo, creación de futuro e innovación que nos trae la nueva economía de la complejidad. La ciencia constituye una visión del mundo dependiente de las realidades, valores y creencias de cada época, apareciendo así, como producto de nuestra evolución cultural, de modo que cada modelo de pensamiento científico genera modelos políticos, sociales y económicos. Para cualquier observador neutral resulta obvio que los modelos de gestión y control utilizados hoy en la política económica, en las finanzas y en la empresa, muestran una falta de ajuste con las realidades, valores y creencias actuales. La filosofía y las técnicas de gestión y de control tuvieron su origen y desarrollo en entornos más simples y en principios científicos que se fundamentaban en el orden, en la estabilidad y en el equilibrio; pero las tensiones, inestabilidades y turbulencias que caracterizan los entornos de innovación, integración y globalización de la nueva economía, obligan a introducir nuevos modelos de pensamiento científico basados en principios de globalidad, de no equilibrio y de inestabilidad, en los que la información del entorno, realimentada por las propias actuaciones gestoras, al tornarse variable endógena, ya no permite establecer horizontes temporales de gestión, ni el necesario tiempo de aprendizaje para la adaptación. Todo ello demanda nuevos métodos y técnicas para el estudio de las emergentes organizaciones informales que practican el aprendizaje complejo en la oportunidad y gestionan la innovación y la creatividad de la nueva economía. La cultura científica, como la literaria, la poética o la pictórica, son creaciones humanas, producto de la visión del mundo y del espíritu de cada época. Así, las categorías más destacadas de la posmodernidad, como el pluralismo, la variedad, o la contingencia, habían sido generadas en la sociedad moderna; pero ésta careció de ideales para integrarlas. Para la modernidad, el desorden, la inestabilidad y el no equilibrio eran considerados como un fracaso. Sin embargo, el protocolo de la complejidad constituye una síntesis científica que integra ya, en sus ideales, "orden-desorden", "estabilidad-inestabilidad" y "equilibrio-no equilibrio". Del mismo modo que hubo un tiempo en el que el gestor tuvo que aprender a anticipar, a asumir y a gestionar la incertidumbre, en la nueva economía de hoy tiene que aprender a hacerlo con la inestabilidad, el desorden y el no- quilibrio que se producen en todos los procesos de cambio evolutivo que, a su vez, sean creativos. A lo largo del libro hemos ido también, identificando estas nuevas categorías y sensibilidades alternativas que, en el ámbito de la gestión y del control, nos trae el pensamiento posmoderno. Así pues, se trata de un libro que permitirá al lector actualizar su cultura científica en todo lo relacionado con la gestión económica en sus aplicaciones a la innovación, a la integración y a la globalización. La crisis financiera del 98 intensificó el interés por los procesos de innovación, integración y globalización, lo que nos ha impulsado a explicar esta nueva legalidad científica, ya muy avanzada en otros campos del saber, al ámbito de la gestión y del control de la nueva economía, en un lenguaje más asequible y más próximo a la ciencia del management. El capítulo I aborda la evolución del tratamiento de los problemas relacionados con la gestión y el control de los recursos económicos en el marco de la evolución del proceso científico general, desde la era industrial hasta la de la complejidad, concretándose, en el capítulo II, los cambios de los correspondientes entornos, de los aprendizajes e, incluso, de los sistemas de representación contable. El capítulo III se dedica, en especial, a la aplicación a la economía de la metodología del caos y de la complejidad. El capítulo IV trata la gestión y el control en la innovación, atendiendo, específicamente, a la valoración del capital intelectual, o fondo de comercio tecnológico, a través del balance integrado de conocimiento. El capítulo V, destinado a la economía institucional y a la gestión estratégica de los cambios, presta especial atención a la nueva ética superadora correspondiente a la economía material. El capítulo VI, que se refiere a la mundialización, al globalismo y a la globalización, además de delimitar su alcance, contempla las estrategias que demandan los actuales procesos de integración y de globalización. En el capítulo VII, partiendo de la consideración concreta de la gestión financiera, se estudia la gestión en la macro y en la microrregionalización y se analiza el fracaso de la gestión global y las causas de las recientes experiencias negativas de determinadas actuaciones y organizaciones internacionales, así como los requerimientos en el nuevo orden económico global. El capítulo VIII configura la actuación de los controles públicos en la integración y en la globalización, con referencia a la gestión eficaz de la red que conforman en el marco de la Unión Europea. A la gestión de la integración y la descentralización en España se dedica el capítulo IX, que se introduce con detalle en problemas de gestión como el de nuestra entrada en el Sistema Monetario Europeo, el proceso hasta la integración de nuestro País en la Unión Económica y Monetaria o la descentralización del Estado hacia las Comunidades Autónomas y las orporaciones Locales. Finalmente, se ha reservado el capítulo X al capital humano del gestor de la nueva economía, a la importancia de su formación en la nueva cultura científica, al aprendizaje organizativo en un mundo sin fronteras y a la tarea del economista institucional en los nuevos modelos de gestión y control complejos.