(El) proceso de apertura y normalización se consolida en los noventa, una década en la que la narrativa de la isla se dota de armas hasta entonces prohibidas, como las de la furia, el pesimismo, la ironía y el humor negro. Da la sensación de que el sueño revolucionario se ha venido abajo definitivamente y, entre las ruinas, surgen autores como el conocido Pedro Juan Gutiérrez (Trilogía sucia de la Habana) o Fernando Velázquez Medina (Última rumba en La Habana)... inaugurando un nuevo género que podríamos llamar ""realismo sucio tropical' . Pablo Martinez Zarracina en La Voz de Cádiz, El Comercio de Gijón y El Norte de Castilla ... me ha parecido espléndida, muy poderosa, densa de estilo pero sin palabrería, con excelentes personajes y a la vez con una cualidad testimonial muy precisa y muy desoladora: en las escenas sexuales hay una mezcla de erotismo y de exasperación que intuyo muy propia de la situación del país. Los episodios de guerra son magníficos: el de los caníbales tiene una cosa sombría como de Joseph Conrad. Y el final -esa referencia a quienes se mueren por irse y nada más irse ya están muertos de nostalgia-lo deja a uno en una profunda melancolía. Y el uso de la música, de las letras sentimentales, cuadra muy bien en el tono de la historia. Enhorabuena, de verdad. Siempre encuentro que hay algo muy profundamente español en Cuba. Antonio Muñoz Molina, miembro de la Real Academia de la lengua, Premio Planeta de novela, Premio Nacional de la Crítica y Nacional de Narrativa. Fernando Velázquez Medina es el único novelista cubano en el que creo. Norberto Fuentes Premio Casa de las Américas, autor de La autobiografía de Fidel Castro Es un acierto que este submundo nos sea mostrado a través de un personaje femenino cuya vivencia nos recuerda al Viaje al fondo de la noche de Céline. Velázquez nos hace sentir la tensión propia de un mundo cerrado". Plinio Apuleyo Mendoza, escritor y diplomático colombiano, Premio Plaza & Janés de novela, coautor del bestseller Manual del perfecto idiota latinoamericano. En este libro, hay un escritor. Antonio Benítez Rojo, Premio Casa de las Américas de cuento,Premio Pushcart de ensayo por La isla que se repite,