La historia familiar del autor se inicia en la posguerra con sus abuelos, que en sus propias palabras eran «extremadamente pobres pero estaban enamorados», y se mudaron desde Kentucky a Ohio buscando escapar de la pobreza. Fundaron una familia de clase media tradicional que luchó contra los conflictos característicos de su tiempo y de su generación.
Vance tuvo la suerte de poder escapar a un destino miserable en su pueblo natal y, después de pasar un tiempo en la Marina, se graduó en la Yale Law School y se convirtió en un abogado de éxito que ahora reside en San Francisco.
JD Vance realiza un análisis de la clase blanca trabajadora en el seno de una de las cuales creció, de sus luchas y conflictos, de sus valores, de su orgullo e individualismo, de sus duros trabajos físicos mal remunerados y de su búsqueda de culpables siempre puertas afuera, nunca responsabilizándose de su propia desdicha. Una clase social en decadencia, marcada por su amor a la tierra, por su fe religiosa y por la comunidad a la que se pertenece. Gente que arrastra una tendencia a la violencia física y verbal, al alcoholismo y las drogas y que se conforma con vivir de los subsidios del Gobierno y es despreciada por sus compatriotas de ambas costas del país.
Hillbilly, una elegía rural es una reflexión autocrítica muy necesaria y preocupante acerca de la pérdida del sueño americano para un gran segmento del país.