«Os invito a pasear por los poemas que siguen y a no pasar por alto el último capítulo, en el que se ha incluido algo inusual en un libro de versos: una encuesta sobre cómo fue el primer beso de doscientascincuenta personas». LUIS ALBERTO DE CUENCA Este libro es especial.Trata del beso. Y un beso, ya se sabe, es capaz de todo. Essusceptible, como toda reacción nuclear, de producir reacciones encadena de consecuencias imprevisibles. Un beso sirve tanto parareventar conceptos, como para reventar familias. Y también para hacertodo lo contrario. «He tenido muchos primeros besos, y todos deverdad, así que me di cuenta de que la verdad son muchas» ùdijoKostia.Pero si con todos los besos hay que tener sumo cuidado, con elprimero más. No quiere esto decir que, por lo que respecta a otrosbesos, incluido el osculum infame, uno se pueda relajar. Es solo queel primero es el primero, del mismo modo que ningún pecado iguala alprimer pecado, al pecado original. Por ello, no te pierdas tampoco laencuesta sobre el primer beso, contenida en este Besos de otrosmundos, algo novedoso e inusual en un libro de poe