Hace una semana que le encontraron, ahorcado, y sólo yo, que no sé de él desde hace muchos años, conozco sus motivos.
Cuando David se suicidó, Sandra y él llevaban ya años sin verse. Pero ambos sabían que seguían atados por un oscuro secreto, por algo que ocurrió una tarde de verano cuando los dos formaban una pareja de adolescentes rebeldes y enamorados. Algo trágico e irremediable que iba a marcar sus vidas para siempre. Con una prosa directa y envolvente, y unos protagonistas con una fuerza y un carácter inolvidables, El juego del ahorcado nos acerca a una tormentosa iniciación sentimental en la España de los años ochenta. Es la historia de un amor tan salvaje como sólo puede serlo el de la adolescencia, pero es también una historia de suspense, un drama psicológico y un retrato agridulce de los jóvenes de todos los tiempos, que guardan secretos, que crecen a escondidas de sus mayores y que conservan la crueldad y la inocencia de los niños. Una novela sorprendente que atrapa al lector en los hilos de una trama absorbente y llena de claroscuros. Con un ritmo irresistible y un tono irónico, duro y a la vez dulce y nostálgico, El juego del ahorcado nos acerca al instante en que se deciden las vidas, a esos juegos adolescentes que muchos años después se cobran víctimas...