Los textos de Jacob Taubes aquí reunidos -artículos sobre la historia de la religión y del espíritu, reunidos y prologados por Aleida y Jan Assmann, Wolf-Daniel Hartwich y Winfried Menninghaus- cubren el período que abarca desde 1953 hasta 1983. Sobre ellos recae, por lo tanto, el peso de dar cuenta del desarrollo de su pensamiento durante un lapso de treinta años. Surgidos en épocas diversas y en marcos espirituales muy alejados unos de otros (Harvard, Columbia, Berlín, Jerusalén), estos ensayos resultan hoy, como en el momento de su escritura, fascinantes, dotados de una extraordinaria riqueza de sentido, originales y capaces de generar una inspiración francamente inagotable. En conjunto, los artículos diseñan una genealogía de la religiosidad de la Edad Moderna, y permiten entrever el hilo conductor del pensamiento de Taubes: la gnosis, que es, para él, una forma de pensamiento y de vida marginal que se mantiene en el límite. Porque, efectivamente, Jacob Taubes piensa desde el límite: escribe sobre teología e historia de la religión como filósofo, sobre temas filosóficos como teólogo, sobre el cristianismo como judío y sobre el judaísmo como paulino, sobre temas de la cultura y la política como gnóstico y como apocalíptico. En sus escritos, Taubes hace una arqueología de la modernidad en diálogo con Blumenberg y Buber, Scholem y Hans Jonas, Heidegger y Marcuse, con Rosenszweig, Paul Tillich y Carl Schmitt. En esta lectura gnóstica, la religión -el culto- y la cultura están enfrentados como opuestos irreconciliables. Pues si la cultura le permite al hombre hacer habitable el mundo, le impide, a su vez, recordar su extrañamiento constitutivo del mundo. La tarea de la religión es entonces -dice Taubes- hacerle recordar al hombre ""lo diferente de lo dado"".