Este libro ofrece una historia ilustrada y sucinta de Gran Bretaña en los últimos tres siglos, desde su formación como estado soberano con la Unión de Inglaterra y Escocia en 1707 hasta su pérdida parcial de soberanía al entrar a formar parte de la Comunidad Europea tras su aprobación en el referéndum de 1975. El tema general de este volumen es la interacción entre el Estado y la sociedad, y en particular entre el parlamento y el electorado. La tan retrasada introducción de la democracia es vista como una consecuencia del inherente conservadurismo de la sociedad británica - o al menos la inglesa. Las causas reaccionarias eran más poderosas, y las fuerzas de inercia más duraderas, que las campanas radicales - una conclusión que se ve quizás fortalecida por los resultados de las elecciones de 1992.