En el variopinto panorama de las diferentes sensibilidades: ecologismo, pacifismo, socialismo, participación ciudadana, sociedad civil, lo que se combate son las mil caras del patriarcado. Y frente a él, las mujeres y las feministas pueden ser las mejor dotadas teórica y prácticamente, ya que llevan más de treinta años trabajando en ello, tienen respuestas globales a los asuntos de la violencia, el deseo, el dominio simbólico, las desigualdades, los roles, o el poder patriarcal, que constituyen las raíces del presente desorden mundial. Las mujeres necesitan articular propuestas en economía, política, cultura y más allá de los «temas» propios de mujeres que sólo les afectan a ellas. Es el final de la endogamia femenina, el inicio de un nuevo ciclo ante una civilización agotada que al intentar perpetuarse se devora a sí misma. Victoria Sendón entra en este libro en los problemas que nos plantea la era global, que no sólo supone una nueva etapa del capitalismo, sino -y sobre todo- la última fase del patriarcado. Cuando todas las máscaras han caído sólo nos queda el rostro desnudo de la violencia. Ante este panorama a las mujeres con una conciencia crítica sólo nos queda comprometernos con una cultura de vida.