Jonathan Schell describe en este ensayo una vía para salir del baño de sangre del siglo XX. Sus detallados análisis de las revoluciones francesa y rusa, de la guerra en Vietnam o del desmoronamiento del poder soviético ilustran cómo, con frecuencia, la dinámica de la historia no ha sido determinada por las acciones militares sino por las batallas para conquistar las mentes y los corazones de la gente. Este libro deja bien claro que existe (siempre ha existido) una alternativa a la guerra.