Una ambiciosa historia que replantea la Revolución industrial, laexpansión del imperio británico y el surgimiento del capitalismoindustrial como algo indisociable del comercio de armas. Entre lossiglos XVII y XIX, la revolución industrial transformó Gran Bretaña de una economía agrícola y artesanal a otra dominada por la industria,dando paso a un crecimiento sin precedentes de la tecnología y elcomercio, y situando al país en el centro de la economía mundial. Pero la historia comúnmente aceptada de la Revolución industrial, ancladaen imágenes de fábricas de algodón y máquinas de vapor inventadas porgenios sin límites, pasa por alto la verdadera raíz de la expansióneconómica e industrial: la lucrativa contratación militar que permitió el estado de guerra casi constante del país a lo largo de 150 años.La demanda de armas y material bélico que permitió a los ejércitos,armadas, mercenarios, comerciantes, colonos y aventureros británicosconquistar una inmensa porción del globo impulsó a su vez el auge deinnumerables industrias asociadas, desde la metalurgia hasta la banca. Con la Revolución Glo