La primavera de 1418 llega acompañada de los últimos ecos del concilio de Constanza, en el que se han tomado una serie de graves y solemnesdecisiones en pos de atajar el quebrantado estado espiritual y ladesunión del momento. Dietrich von Mörs ve en la nueva doctrina delconciliarismo una oportunidad dorada para aumentar su poder einfluencia, formando un fuerte partido de arzobispos y cardenales quepueda dominar tanto en Roma como en las tierras alemanas. Para elloencarga a su hombre de confianza, Hans Dörflinger, que escolte, juntocon su animoso e inseparable castellano Pedro de Peñafiel, a unemisario eclesiástico hasta Bremen, donde espera empezar a urdir sunueva red de influencias. Tras un largo y peligroso viaje, Hansdescubre al llegar una oscura trama para asesinar al obispo de esaciudad, así que se dispone a desenmascarar a los culpables. Pero losconfabulados contraatacan, deseando eliminar a Hans y sus amigos, cuya intempestiva y molesta llegada desbarató el siniestro plan. Así,aparecerán en escena los crueles y dañinos Vitalienbrüder, los piratas del mar del norte, y Hans también tendrá