ESTA CRÓNICA RECORRE EL ESPACIO GEOGRÁFICO Y SOCIO-CULTURAL DEL FLAMENCO DURANTE LOS AÑOS DE TRANSICIÓN POLÍTICA EN ESPAÑA; UN PERÍODO DE PROFUNDOS CAMBIOS EN LOS HÁBITOS COLECTIVOS. PARA DAR CONTINUIDAD A LA NARRACIÓN, LA CRÓNICA SE PROLONGA MÁS ALLÁ DE ESE MARCO TEMPORAL, ADOPTÁNDOSE EL FORMATO DE UNAS MEMORIAS. PROTAGONISTAS PRINCIPALES DE LA HISTORIA SON VIEJOS CANTAORES, OBLIGADOS PRACTICANTES DEL OFICIO DE SOBREVIVIR. SU TESTIMONIO, Y EL DE OTROS INFORMANTES, CONFORMAN UN ARGUMENTARIO VITAL CON CARÁCTER DE DOCUMENTO ANTROPOLÓGICO. EL RELATO GRAVITA SOBRE JEREZ DE LA FRONTERA Y SU ENTORNO, CUNA DEL TERRITORIO FLAMENCO, Y SE EXTIENDE A OTRAS LOCALIDADES, CON MAYOR ATENCIÓN A LOS ESCENARIOS DE MADRID Y BARCELONA, CIUDADES PRIMORDIALES EN LA PROYECCIÓN DEL CANTE, DEL TOQUE Y DEL BAILE. LA CRÓNICA SE COMPLEMENTA CON UN ENSAYO EN EL QUE SE ANALIZA LA IMPORTANCIA DEL MESTIZAJE EN EL DESARROLLO DEL FLAMENCO.