Tras padecer una devastadora epidemia, la ciudad de Córdoba encontróapoyo en la Iglesia, la Nobleza y el Cabildo municipal, quienes seunieron para erigir numerosos Triunfos a San Rafael. Este viaje seinició en 1651, con la construcción del primero, y culminó en 2014,con la finalización del último. Una historia de 372 años que ha legado a la ciudad monumentos únicos, enriqueciendo aún más suexcepcionalidad. Lo más destacado es cómo Córdoba ha dotado a lafigura del Arcángel de una iconografía propia. En lo que respecta asus Triunfos, San Rafael se alza en lo alto de su pedestal, con sucaracterística nimbo, vestido con túnica, portando el bordón deperegrino, una capa o manto y calzas hasta media pierna. En una manosostiene un pez y en la otra, la cartela con el juramento que lodeclara el custodio de la ciudad: Yo soy Rafael ángel, a quien Diostiene puesto para guardia y custodia de esta ciudad". Paraexperimentar esta singular iconografía, una visita a Córdoba esimprescindible. ôEste libro es un tributo a la figura de San Rafael y a la ciudad que tanto lo venera, una invitación a explorar la mag