Con motivo del día del libro de 2016, la edición electrónica de esta obra se presenta dedicada por Beatriz Rodríguez y con el siguiente contenido extra, creado por la propia autora: el recetario de los platos de Chabela, un análisis de los personajes y un recorrido por los escenarios donde transcurre Cuando éramos ángeles.
Clara, una joven periodista, vive en un pueblo de menos de mil habitantes, donde lleva una vida tranquila. Dirige el periódico digital local, aunque aspiraba a mucho más, y no se relaciona con casi nadie, a excepción de Chabela, la dueña del hostal Las Rosas, donde come y duerme, e intenta olvidar la reciente muerte de su marido, bebiendo por las noches y saliendo a correr por las mañanas.
La aparición del cadáver de Fran Borrego, uno de los dueños de las tierras que rodean el pueblo de Fuentegrande, hará que esa vida aparentemente tranquila le muestre una sociedad repleta de envidias, intrigas y tramas incompletas que provienen de un pasado que desconoce.
Mientras Clara inicia una investigación sobre la muerte del cacique, entrevistando a distintos personajes que pueden estar involucrados en su asesinato, nos adentramos en un flashback, ambientado en los años noventa, que muestra la verdadera historia de cada uno de ellos, así como el descubrimiento, por parte de este grupo de adolescentes, del sexo, el amor, la ira, la amistad, la decepción y la venganza.