Nace este libro con la vocación de rescatar el viejo tesoro del casticismo madrileño, que viajaba por el tiempo a bordo de un galeón hundido por la tempestad del desarrollismo, de la dinámica desbordante de ese poblachón manchego que apostó por ser metrópoli. El Libro del Casticismo Madrileño en un compendio de lo que se fue y de lo que permanece, un aproximación al lenguaje popular, a la forma de hablar de los madrileños, que sobrepasa la jerga utilizada por Arniches, Ramón de la Cruz o Ramón Gómez de la Serna. El autor ha recuperado el nervio del casticismo más trasnochado, del popular y hasta del prosaico. Ha reunido en el capítulo correspondiente al diccionario de palabras castizas, un millar de términos, expresiones y voces del argot madrileño. Recopiladas gracias a lo que nos dejaron los clásicos del madrileñismo, pero sobre todo, a los testimonios de los madrileñistas vivos. En este libro hay un lugar para los refranes, coplas y dichos más castizos; una galería dedicada a los madrileños más fetén y a los castizos se adopción; un espacio abierto para recorrer los monumentos al casticismo repartidos por toda la ciudad, y varias rutas íntimas, algunas inéditas, para descubrir el Madrid más castizo. En las páginas de este libro encontrará el pollo-pera, el baranda, el batú, el congrio, el manolo, la contraria, el chispero, el gomoso, la ja, el melindre y la costilla un buen motivo para, en fraternal cuchipanda, ir de bureo por el foro, con los acais bien abiertos, sin achares de otros tiempos, recibiendo las hembras el artículo de chulos cubiertos por la pañosa, para encontrar la bacalá de la aucha y gastarse unos cuantos barés en la compra de este libro retrechero, más castizo que la calle de Alcalá. Angel del Río es Cronista Oficial de la Villa. Periodista implicado en la vida de la ciudad, es autor de varios libros sobre Madrid, además de colaborador habitual en diferentes periódicos en las secciones de local.