La obra del grupo de escritores nucleado alrededor de la revista Orígenes (1944-1956) representa el mayor momento de la literatura cubana del siglo XX y equivale en importancia a la obra de los mexicanos de la revista Contemporáneos y a los argentinos de Sur. José Lezama Lima, Virgilio Piñera, Eliseo Diego, Fina García Marruz, Cintio Vitier son algunos de sus nombres. Al análisis de lo escrito por ellos, y al pronóstico de lo que serían en el futuro, dedicó María Zambrano su esclarecedor ensayo La Cuba secreta. Forjadores de obras espléndidas y disímiles, se encargaron también de construir el canon de la poesía cubana. De manera que hablar de Orígenes supone hablar de toda la literatura del país, de las difíciles relaciones entre arte y nacionalismo, nacionalismo literario e historia política. El libro perdido de los origenistas estudia, mediante la obra de estos escritores y de un par de escritores cubanos del siglo XIX como Julián del Casal y José Martí, los vínculos entre poesía e historia. Discute las interpretaciones al uso que intentan identificar la obra de esos escritores a la revolución triunfante en 1959. Y es por ello un estudio acerca de las tergiversaciones y la desmemoria histórica. Valiéndose del análisis de piezas literarias y de algunos detalles biográficos, su autor trata de aquello que constituyó tema del editorial del primer número de la revista: la imbricación de arte y vida. El libro perdido de los origenistas reúne ensayos escritos a lo largo de quince años de estudios y polémica literaria. Antonio José Ponte (Matanzas, Cuba, 1964) reside en La Habana desde 1980. Ha trabajado como ingeniero hidráulico, guionista de cine y profesor de literatura. Ha publicado dos libros de cuentos: In the cold of the Malecón & other stories (City Lights Books, San Francisco, 2000) y Cuentos de todas partes del Imperio (Éditions Deleatur, Angers, 2000). Éste último traducido al inglés como Tales from the Cuban Empire (City Lights Books, San Francisco, 2002). Ha publicado varios libros de ensayo: Las comidas profundas (Éditions Deleatur, Angers, 1997), traducido al francés como Les Nourritures lointaines (Éditions Deleatur, Angers, 2000), Ramón Alejandro (Art Tribu's, Angers, 1999), Un seguidor de Montaigne mira La Habana/Las comidas profundas (Verbum, Madrid, 2001) y El libro perdido de los origenistas (Aldus, México, 2002). Ha recogido toda su poesía en Asiento en las ruinas (Letras Cubanas, La Habana, 1997). Es autor de una novela: Contrabando de sombras (Mondadori, Barcelona, 2002).