Este libro aborda algunos de los aspectos más importantes de la política exterior y de la actuación norteamericana en el mundo, sobre todo en la etapa más reciente. Higinio Polo analiza en este volumen la actividad de los Estados Unidos en distintos escenarios del planeta, desde Venezuela hasta Corea, pasando por Afganistán, y deteniéndose, sobre todo, en Iraq, y pone de manifiesto los mecanismos en los que se apoya el nuevo imperialismo norteamericano: el recurso a la guerra como instrumento de política exterior, los bombardeos sobre ciudades desarmadas, el sufrimiento de la población -con severos bloqueos, como en el caso de Iraq antes de la reciente guerra- la utilización del terrorismo y de la tortura, de la mentira y de la ambición más descarnada, de la manipulación de los organismos internacionales, el atropello a los derechos humanos, el desprecio y la indiferencia ante el sufrimiento de pueblos enteros sojuzgados, para conseguir unos objetivos que pueden resumirse en pocas palabras: la rapiña sobre los recursos de otros. Así, se constata la emergencia en Estados Unidos de un poder con peligrosas connotaciones fascistas, y cuya intención de impulsar guerras preventivas nos ha puesto frente a un desafío trascendental, porque los Estados Unidos de América se han convertido en un Estado delincuente y, hoy, la acción más urgente de los pueblos del mundo y de la opinión democrática del planeta es detener y derrotar esa criminal política de Washington.