?El estudio no podría ser más minucioso y exhaustivo: nuestro autor sintetiza la historia de la criminología para que entendamos mínimamente la materia tratada, y a continuación estudia el crimen de ficción en cada época, como perfecto reflejo de la sociedad que lo produce.? (Revista Prótesis)
?A través de sus páginas, el autor va guiando al lector por diversos aspectos de la sociedad actual, como el cómic, el cine o la psicología, para enseñarle cómo se ha tratado el mundo criminal desde estas perspectivas y, viceversa, para mostrarle cómo el crimen ha influido en la elaboración de películas, en la redacción de libros o en el desarrollo de teorías psicosociales.? (Blog Hablando de criminología)
?Vemos cómo cambian los conceptos y hasta los gustos en el tema criminal, la censura en determinados momentos y países o lo mal visto que estaba crear ficción partiendo de hechos delictivos. Hubo épocas en que deformidad fue sinónimo de maldad y llegamos hasta la actualidad con crímenes de despacho o de Estado.? (Web Anika entre libros)
El crimen impregna la cultura popular y las artes, en algunos casos incluso como tema exclusivo, esta obra recoge por primera vez la incidencia de los criminales en la cultura contemporánea.
El debate sobre si las manifestaciones artísticas, los videojuegos, los cómics o el cine provocan un aumento del crimen en las ciudades contemporáneas sigue abierto. Periódicamente se lanzan desde los medios de comunicación preguntas sobre si la cultura popular convierte a nuestros jóvenes en asesinos en potencia. ¿Qué hay de cierto en ello? La única forma de saberlo es recurrir a libros como Mentes criminales que realiza un exhaustivo trabajo de investigación y contrasta, con sencillez y datos rigurosos, la presencia del crimen en los productos de ocio actuales y la presencia del crimen en las calles de nuestras ciudades. El libro presenta el crimen como catalizador de la cultura pop y no elude valorar la influencia que este tiene en la sociedad actual.
La secta homicida de Charles Manson, el asesinato de John Lenon, pero también la literatura y el cine negro, el rock que, en su afán de remover conciencias recurre a ambientes y conductas criminógenas, y, sobre todo, los videojuegos, criticados sistemáticamente y vigilados como un germen de criminales: Francisco Pérez Fernández no elude ninguna cuestión y presenta una visión en gran angular del crimen y la cultura popular del S. XX y del XXI. Pero además de eso desgrana históricamente el paradigma criminal de cada época desde las conexiones decimonónicas entre crimen y deformidad, hasta el modelo de villano total del cómic y el cine, un criminal que no necesita motivaciones y su objetivo es el control del mundo.
Razones para comprar la obra:
- Es una obra novedosa porque actualmente no existe otra que ofrezca una visión panorámica de la influencia del crimen en la sociedad.
- El libro va dirigido tanto a los amantes del crimen como a los interesados por las manifestaciones artísticas y populares contemporáneas.
- El tema que trata está de actualidad ya que la polémica sobre la relación entre los videojuegos, el cine, el rock o los cómics y la proliferación de conductas criminales se renueva constantemente.
- El libro se completa con un abundante material documental compuesto por: carátulas de álbums de rock, portadas de cómics, fotogramas de películas famosas o extractos y citas de textos científicos y literarios.
Una obra de referencia para todos aquellos que deseen entrar, con argumentos, en el debate sobre el auge del crimen contemporáneo y su relación con el arte y los productos de ocio de la cultura popular. No es bueno juzgar sin conocer a fondo esta compleja relación.