Si observamos a los caballos mientras juegan en el cercado o en el prado, podremos reconocer en sus movimientos muchos de los llamados números circenses, aunque, desgraciadamente, la palabra circo se asocia a menudo con movimientos poco naturales y forzados. En realidad, los caballos llevan estos movimientos en la sangre y tan sólo es cuestión de sacarlos a la luz. En ese sentido, la doma libre nos permitirá mejorar el comportamiento natural del animal, así como su confianza y obediencia, y nos ayudará a crear ese binomio que todo jinete desea alcanzar, porque una cosa es montar a caballo y otra bien distinta tener una relación cordial con él.Esta es la razón por la que tantos jinetes aficionados disfrutan practicando pequeños números de circo con su caballo; pero, por si eso fuera poco, el efecto positivo que tienen sobre la salud del animal ya sería causa más que suficiente para que resultasen en sí mismos útiles e interesantes. Nathalie Penquitt es veterinaria y entrenadora de caballos. Además, imparte clases de números circenses y es autora de varios libros de gran éxito.