"La preparación de los maestros y profesores ha sido preocupación de las administraciones, pero antes lo fue de las mismas instituciones que bregaban directamente con los niños y adolescentes escolarizados. Desde los inicios esta tarea exigía la convergencia del saber enseñar con el sentido de las enseñanzas. contaminación Pero, desde la modernidad hay una tendencia a seguir un proceder meramente técnico, de tal manera que muchos docentes sólo saben un puñado de procedimientos, mientras que otros entienden que enseñar consiste en sólo saber el contenido de las ciencias y exigir ese elenco de conceptos. Sin embargo, la realidad denuncia palpablemente un sistema decimonónico de formación de docentes. El autor pretende avezar al candidato a la docencia mediante este trabajo. Esto lo efectúa haciendo comprender el sentido de las instituciones del sistema educativo con relación a la cultura. Posteriormente ofrece el proceso que sigue la escuela, según las etapas históricas. Pero, como no hay práctica sin una fundamentación teórica, pasa a explicar la transformación histórica de los modelos pedagógicos. También analiza las maneras de concretar el currículo y las instituciones en la actualidad, relacionando sus raíces históricas con las praxis institucionales. Por otra parte, el libro concluye con un capítulo más global. Situado en la reflexión sobre la postmodernidad, valora el papel del libertarismo y el comunitarismo."