José Manuel Otero Lastres decide transitar una vereda nada frecuentada en la novela española, y en su intento llega tan lejos como quizá nadie antes entre nosotros. El campo de Bucéfalo viene a ser nada menos que un thriller legal, peculiarísimo género narrativo en el que se combinan elementos de intriga y crítica o denuncia social, al estilo del género negro, con la exploración de ese laberinto, a veces inextricable para el profano, que forman las leyes y el entramado constituido por las personas que las aplican o hacen valer (abogados, jueces y demás profesionales jurídicos). A la ciencia del consumado jurista que es, suma en este libro el autor, en rara mezcla, el instinto del narrador atento a transmitirle al lector la emoción de una historia. Una novela que nos muestra que a veces los más peligrosos delincuentes se revisten con el manto de la ley, que los peores criminales disponen de las mejores coberturas jurídicas, y que atina a contarlo todo con detalle, de forma comprensible y sin perder nunca el rigor.