La próspera y alegre capital del imperio egipcio, Uaset, casi mil años a. C. está sufriendo uno de los peores momentos de su historia. Una plaga está exterminando a la población. Los sacerdotes del culto de Amón, corruptos y manipuladores, quieren sacar partido de la situación, parapetados siempre tras sus privilegios.

Es en esta situación que Akhenatón decide cambiar completamente la cultura religiosa y su influencia sobre la sociedad egipcia. Para desposeer de privilegios y prebendas a los sacerdotes de Amón, el primer paso será encontrar un lugar donde el faraón pueda establecer su nueva residencia y la de la corte, para después fundar el nuevo culto al dios Atón, que será la personificación divina del sol.

Entonces empezará una batalla entre los sacerdotes de Amón que se resistirán por todos los medios a perder su estatus frente al faraón que junto con su mujer Nefertiti intentará instaurar el nuevo orden en la ciudad de Amarna.