La regata Sidney-Hobart es uno de los acontecimientos deportivos más importantes del mundo. La edición de 1998 tuvo un trágico desenlace: seis navegantes fallecieron, muchos resultaron heridos y numerosos barcos se hundieron o sufrieron graves averías. Debido a las duras condiciones que acostumbra a tener esta regata, se le ha dado el sobrenombre de la regata del infierno. Las operaciones de búsqueda y rescate supusieron un enorme despliegue en medios humanos y materiales: aviones, helicópteros y todo tipo de buques, desde barcos de pesca a mercantes o navíos de la armada. Un enorme esfuerzo de organización y coordinación que, sin duda, evitó la pérdida de muchas más vidas. Rob Mundle relata la experiencia real vivida por los propios regatistas, así como por los equipos de salvamento. Nos describe el estado de ánimo, el miedo y los denodados esfuerzos que tuvieron que realizar, tanto las tripulaciones de los barcos participantes como las de los aviones y helicópteros. Todos los que se vieron involucrados de una forma u otra en esta regata, vivieron una experiencia inolvidable con resultados muy diferentes según la habilidad, experiencia y la suerte de cada uno. Una historia excitante de heroísmo, desafío y supervivencia, que se complementa con más de 40 fotografías a todo color.