Carlos III llega a Madrid a ocupar el trono de España con ideas ilustradas y modernizadoras. La ciudad del «agua va», sin aceras y falta de luz, se transforma: las calles se asfaltan y se crean normas de higiene y seguridad. El famoso arquitecto Francesco Sabatini levanta edificios emblemáticos, como la Puerta de Alcalá, y finaliza el Palacio Real. El Salón del Prado se llena de fuentes, entre ellas, la de Cibeles. A esta ciudad de cambios asoman dos parejas, la de los granadinos Lorenzo de Elvira y Gil López y la de las burgalesas Dorita y la marquesa de Valdivielso. El destino los llevará a enredar sus vidas, complicadas por el amor, mientras son testigos de los cambios que experimenta la España ilustrada aún heredera de la picaresca y del engaño. En este Madrid nada será lo que parece. Marquesas que se enamoran de criados, hijos con dos padres, amantes que huyen por las ventanas… todo es posible en esta novela, incluso presenciar el Motín de Esquilache. Con Carolus recorreremos el amplio reinado de Carlos III. El que sigue siendo «el mejor alcalde de Madrid» tuvo un carácter cercano y dócil pero firme en sus propósitos de ilustrar a sus súbditos. Carolina Molina nos narra con pericia los cambios sociales, las modas en el vestir y las costumbres que asoman al siglo XVIII, con situaciones divertidas e inesperadas. Una novela que conmueve y obliga a la sonrisa, tan necesaria en estos tiempos de crisis.