El empleo tiene en nuestras sociedades un significado que va mucho más allá del hecho de que sea la actividad económica por medio de la cual la mayor parte de las personas obtienen los recursos económicos necesarios para vivir y que hace que quienes carecen de él carezcan también de éstos. El empleo tal y como se entiende en esta obra -el reconocimiento público del trabajo según reglas que garantizan a la persona que lo realiza una remuneración previamente establecida y una existencia social digna en tanto que ciudadano- es la dimensión central en torno a la cual se halla construido nuestro orden social. De ahí la especial relevancia política de todas las instituciones, organizaciones y prácticas sociales que lo conforman (sindicatos, empresas, organizaciones empresariales, negociación colectiva, concertación social, la conflictividad laboral, intervención estatal) y de su profunda crisis actual. Es ese empleo y esas relaciones de empleo lo que grandes especialistas en la materia de nuestro país analizan en esta obra.