Cada día millones de personas en el mundo se disponen a vivir de nuevo, a comenzar con la inestimable presencia y cooperación de estos alimentos. Acciones rutinarias como despertarse por la mañana, avanzar en el día con un mínimo estado óptimo para abordar nuestras actividades, serían difíciles de practicar y volver a repetir, si no fuera gracias a sus propiedades virtuosas. Los poemas presentan, con vitalidad y humor, la súbita transformación que experimentamos al tomar estas bebidas, o la fragilidad humana ante lo Ineludible, deteniéndonos sencillamente junto a una taza de café. En Amadores de Café y Té descubrimos la imagen del tiempo «recreándose», el calor de la amistad o la belleza de lo simple a nuestro alrededor. A través de vivencias entrañables, siempre acompañadas de estos fluidos, los lectores podrán reconocer una dimensión minimalista y placentera de la vida.