El estudio que recoge este texto aborda el problema de las construcciones iconográficas de los niños y las niñas entendidas como un complejo semiótico mixto que participa de los valores formales del arte y de las reglas que determinan la coherencia interna debida a todo lenguaje. La intención de la autora ha sido ofrecer un modelo de análisis, un instrumento que permita penetrar en la complejidad del sistema, tanto en su lógica estructural como en la hermenéutica de los significados. Todo ello desde un planteamiento holístico que se presenta como alternativa a los distintos estudios sectoriales sobre el problema. En definitiva, se trata de una nueva mirada sobre el fenómeno del dibujo en la infancia que ofrece una aproximación rigurosa a un sistema vivo, siempre actual e irreductible, e invita a la reflexión sobre la naturaleza de la experiencia artística del niño y la niña y, en consecuencia, sobre la génesis de la emoción estética y de los procesos que tienen la imagen como material conceptual y emocional.