Se trata de un libro que, partiendo de la actual problemática que plantea el fenómeno del cambio climático, analiza los diversos medios -fundamentalmente jurídicos, pero también de otro tipo- que está utilizando la Unión Europea para ralentizarlo en aras a facilitar, al máximo, la progresiva adaptación al mismo. En este sentido, primero, ofrece un acertado análisis del marco general que legitima y avala los esfuerzos de la Unión en este campo. Luego valora exhaustivamente el conjunto de normas y de actos que vienen adoptando las instituciones europeas y que conforman el marco normativo específico. Después, evalúa, con detenimiento, las actuaciones externas más relevantes que viene emprendiendo la Unión principalmente desde la óptica del Derecho internacional. En suma, una monografía única, muy extensa, pero de gran intensidad en razonamientos, que defiende el liderazgo de la Unión en este campo.