1914 ha solido concitar la atención de los historiadores por marcar el inicio de la Gran Guerra. Sin embargo, aquel año tuvieron lugar otros muchos acontecimientos, reflejo de las profundas transformaciones que, a nivel mundial, pusieron fin al largo siglo XIX y die-ron comienzo al corto siglo XX -por decirlo con la feliz expresión de Eric Hobsbawm-. Sucesos como el ataque a la Venus del espejo por parte de Mary Richardson, el discurso de Ortega y Gasset ""Vieja y nueva política"", la toma de Veracruz por los marines estadounidenses, el estreno de El ruiseñor de Igor Stravinsky, los asesinatos de Francisco Fernando y de Jean Jaurès, la apertura del canal de Panamá o la llegada al pontificado de Benedicto XV ponían de relieve los cambios que estaban aconteciendo en todos los órdenes -político, económico, social, cultural, relaciones internacionales, etc.-. Aquel año fue así testigo del apogeo de la reivindicación sufragista, de la presencia de los intelectuales en la vida pública, de la emergencia de Estados Unidos como gran potencia, de la eclosión de la vanguardia artística, de la irrupción del nacionalismo etnicista de tono violento, de la pugna entre revolucionarios y posibilistas en el seno del movimiento obrero o del malestar de la fe religiosa con la modernidad. Acontecimientos todos ellos que hacen de 1914 mucho más que el año de la Gran Guerra: fue el año que cambió la historia. Este libro se fija en todo ello. Con ritmo vibrante y de la mano magistral de Antonio López Vega, el lector se introducirá en el ambiente de 1914 a través de acontecimientos singulares que cambiaron para siempre la historia de la humanidad.