La actual sociedad cambiante no siempre mira la repercusión que susactos proyectan sobre la educación. El traslado a la escuela deinauditos procesos de banalización social es constante. La sociedadque (des)educa vincula la realidad social y la realidad educativa como dos ejes ineludibles en la educación de las jóvenes generaciones. Ensus páginas abunda el análisis sobre la abrupta realidad que,irremisiblemente, alcanza a la labor desarrollada en la escuela, casisiempre tan desasistida y abandonada por quienes también deberíaninvolucrase en la misión social que se le tiene encomendada.Este libro invita a la reflexión colectiva. En él se describen losprocesos de cambio social que están afectando sobremanera a nuestrosjóvenes, casi siempre con mayor influencia que la ejercida por laescuela o la familia. La distancia advertida entre el sentidoproactivo de ambas y el desinterés de muchos agentes socialeseducativos está provocando una profunda quiebra en la educación de las generaciones jóvenes.La educación siempre es la esperanza, pero su labor es fácilmentedestruida fuera de sus aulas. Son muchos los enemigos externos y pocas las posibilidades dadas para acompañarla en la transformacióneducativa, ética y moral de la sociedad. Es fácil que su prestigio sediluya en un mundo líquido, en el que encuentra un sinfín deobstáculos.