El amor tal como se trata en este libro va más allá de atracciones sexuales, imágenes o ideas. Tiene que ver con la biología, con la sangre. Keleman habla del amor desde un punto de vista evolutivo, psicobiológico, somático. El amor es ante todo una verdad del cuerpo, una realidad somática. La intimidad se basa en compartir la excitación vital interna. El deseo y el altruismo están profundamente enraizados en la vida celular. Aprendemos o ignoramos qué es el amor en nuestro entorno familiar. Aprendemos a amar de niños: amamos como nos amaron y como nos enseñaron a hacerlo. Una respuesta de amor escasa, excesiva o equivocada durante las cuatro etapas básicas de la crianza, el cuidado infantil, el compartir adolescente y la cooperación juvenil, puede alterar la experiencia somática de la personalidad en cuanto a la forma de ser amado y originar en la etapa adulta un carácter rígido, denso, hinchado o colapsado. Estas alteraciones características de la forma natural de amar y ser amado, se reflejan de forma muy precisa en la relación de pareja y en todo caso pueden ser trabajadas en el recinto seguro de la psicoterapia corporal. Stanley Keleman (Brooklyn, Nueva York, 1931) es un psicoterapeuta estadounidense, pionero del estudio del cuerpo y su conexión con los aspectos emocionales, psicológicos, sexuales e imaginativos de la experiencia humana. Ha estado desarrollando la psicología somática desde los años 60. Vive en Berkeley, California, donde trabaja individualmente y con grupos en el Center for Energetic Studies, del cual es director. A través de sus escritos y de la práctica, impartiendo numerosos cursos también cada año en Europa, ha desarrollado una metodología y un marco de referencia conceptual para la vida del cuerpo.