Que es necesario reconstruir urgentemente la izquierda es algo de lo que ya no duda nadie. Para ello debe partirse del reconocimiento de las debilidades, errores y desviaciones cometidos en el pasado, analizando sus causas. En este libro se brinda una contribución en ese sentido. Una de las cuestiones centrales que en él se abordan es la crítica de la concepción de la política como el arte de lo posible, una concepción que fatalmente conduce a adaptarse oportunistamente a lo que existe. Para una izquierda digna de tal nombre, la política ha de ser el arte de hacer posible lo imposible. Por ello resultan del máximo interés las reflexiones contenidas en este texto acerca de cómo debe ser el instrumento político que permita responder a los nuevos desafíos que plantea el mundo del siglo XXI. Una herramienta que permita construir la fuerza social y política que haga posible cambios sociales profundos. Para conseguir este objetivo deben superarse las formas orgánicas del pasado, fruto de la copia acrítica del modelo bolchevique de partido, y abandonar la concepción teórica subyacente a ese modelo. Concepción que no toma en cuenta una de las ideas centrales de Marx: la práctica social como acción que permite que los hombres y las mujeres, al mismo tiempo que transforman las circunstancias que los rodean, se transformen a sí mismos, y con ello logren un desarrollo humano cada vez más pleno. Pero criticar la forma orgánica de partido utilizada en el pasado no significa negar la necesidad de contar con un instrumento político. Éste es indispensable, porque la construcción de una fuerza social popular anticapitalista no se produce espontáneamente, requiere de un sujeto constructor capaz de orientar su acción en base a un análisis de la totalidad de la dinámica social y política; de un sujeto capaz de elaborar la estrategia política que permita aglutinar a los más amplios sectores sociales y políticos contra la actual globalización neoliberal; de un instrumento político que articule la acción de los múltiples y plurales sujetos respetando sus diferencias, y determine las tácticas más adecuadas para ir horadando el poder de las clases dominantes e ir avanzando hacia la construcción de una sociedad que se vaya alejando de la perversa lógica individualista del capital para ir implantando una lógica cada vez más humanista y solidaria. Una herramienta política que nos permita ir edificando el socialismo del siglo XXI. "Este libro propone una iluminadora lectura de lo que fue la izquierda revolucionaria en la segunda mitad del siglo XX, en particular en América Latina, y de sus insuficiencias. Para todos aquellos que, en los debates Foro del Tercer Mundo y del Foro Mundial de las Alternativas, intentan una renovación que esté a la altura de los nuevos desafíos, esta lectura crítica resulta indispensable." Samir Amin