¿Cómo comprender el presente de sociedades que han conocido el desmoronamiento del «paraíso» comunista y vivido los delirios nazi-fascistas? ¿No sería vano definirlas por su régimen político a la vista de la evolución de las democracias occidentales desde la simbólica fecha de mayo de 1968? ¿Se habrían convertido una vez más religión y economía en las palancas que mueven nuestro mundo y la «democracia» en un término cada vez más gastado? ¿O cabría pensar que la democracia está sujeta a tensiones y desarrollos cuya figura última es desconocida, pero cuya indeterminación no la deslegitima como horizonte político de la vida en libertad? ¿No sería entonces la secularización de los fundamentos de la vida social la clave que descubriría la condición histórica de individuos y sociedades, condición que, según Marcel Gauchet, haría de la humanidad «un enigma para sí misma»? A indagar las maneras como se presenta dicho enigma está dedicada la larga conversación recogida en este libro. En ella Marcel Gauchet recapitula los hitos que han configurado su trayectoria intelectual: la etnología, la perspectiva general de una historia política de la religión, la historia del psiquismo y la psiquiatría, la visión del cristianismo como religión de la salida de la religión, la era de los totalitarismos y el paso a la era de los derechos humanos. Un recorrido inseparable del análisis de las tendencias inquietantes que conforman el presente y obligan a repensar la democracia y el sentido de su crisis.