Para la joven arquitecta Katarina Elg, lo mejor de la vida consiste en disfrutar del amor en libertad, sin ataduras. Y aunque le gusta sentirse enamorada, los compromisos duraderos le causan pavor. Su independencia, el derecho de decidir sobre su propia vida, están por encima de cualquier otra consideración. Sin embargo, el día que se queda embarazada decide, contra todo pronóstico, tener a su hijo. Desde el principio encuentra apoyo en su madre, Elisabeth, pero Jack, el padre del niño, reacciona con violencia, convencido de que el embarazo no es un accidente y de que Katarina está tratando de atraparlo. Ante esta reacción, Elisabeth se da cuenta de que ya no puede ocultar la verdad a su hija, que ha llegado la hora de revelarle un secreto guardado durante muchos años. Así, Katarina deberá enfrentarse a ciertos recuerdos de la infancia enterrados durante largo tiempo, y asumir que su dolor y el de su madre son uno solo. Ambas descubrirán cuánto se necesitan para superar ese pasado y construir un futuro en libertad. Ésta es una historia sobre la vergüenza y la culpa, pero también sobre el placer y el amor; es una historia que habla de mujeres que maduraron demasiado pronto. Con gran sutileza, Marianne Fredriksson autora de Las hijas de Hanna , gran éxito de ventas en toda Europa recrea los lazos que hoy en día unen a madres e hijas y el enorme poder de esa unión.