Instrumento didáctico diseñado para apoyar el desarrollo de la educación vial. Además de los apartados propios de cualquier agenda (datos personales, teléfonos, direcciones, etc.), su cuerpo central se presenta como un juego en el que se despliegan diversas informaciones relacionadas con las señales de tráfico, preguntas para resolver por los niños, e historias de una pandilla y de cómo viven su cotidianeidad en una ciudad en la que los coches, las bicis, las motos y los autobuses le van quitando espacio al peatón. Útil como apoyo específico a programas de Educación Vial, en clave de convivencia entre los distintos agentes que operan en el espacio urbano, con énfasis en el respeto a los demás. La Agenda de Educación Vial se presenta así como una herramienta para la sensibilización, dirigida a los niños y niñas que comienzan a descubrir la ciudad como aquella ""selva de asfalto donde los tigres son autobuses y los leones son autos"". Una invitación dirigida a los niños para conocer y aplicar las normas básicas de la seguridad vial. Una propuesta para reflexionar sobre cómo se puede participar, ya desde la infancia, en la tarea colectiva de conseguir una ciudad más segura y habitable para todos.