Al Rizao lo acostaron en la mesa de matar cerdos para amortajarle. Damián y sus amigos se hicieron con un camión en Bullas para ir a defender Madrid en julio de 1936. Ramiro se encontró con Juanico Mataburros en Madrid en marzo de 1939 en los combates contra los casadistas y se salvó de ser fusilado por la incontinencia urinaria de uno de los miembros de la Comisión Militar. Pepito Téllez se arruinó por sus obreros y Pepe el Ciempiés fue fusilado al final de la guerra en la cárcel de Murcia por haberle cortado las orejas al cura Zorro. A Consuelo la Sietededos la enterraron en una fosa común del cementerio de Espinardo porque su madre no pudo reunir los cien duros que le exigió el enterrador cuando, tras la ejecución, fue a reclamar su cadáver. Paco el Periquito se exilió a México donde, junto al resto de la expedición de exiliados españoles, fue recibido en el puerto de Veracruz por el Sindicato de Tortilleras. Manolico el Pelao le puso un par de torpedos al Baleares en la línea de flotación... Son las historias particulares que entretejen la memoria colectiva de un tiempo recientemente pasado. La crónica de una tierra y de sus gentes, marcada por la tragedia, la derrota y la reconquista de la vida cotidiana... y una buena dosis de ese humor fatalista que caracteriza a las tierras hispánicas. Antonio Fernández Ortiz (Cieza, Murcia). Licenciado en Historia. Especialista en la URSS y Rusia. Ha publicado artículos en revistas rusas y españolas (Alma Mater, Dialog, Kentavr, Utopías, Ábaco, El Viejo Topo, etc.). Autor del ensayo ""Chechenia versus Rusia: el caos como tecnología de la contrarrevolución"", publicado por El Viejo Topo (2003). Ha realizado traducciones al español de autores y textos rusos como ""El libro blanco de Rusia. Las reformas neoliberales (1991-2004)"", también editado por El Viejo Topo (2007). Está estrechamente vinculado a Rusia desde el año 1992, en que comenzó a realizar prolongadas estancias de estudio y trabajo en diferentes centros de investigación de este país. En la actualidad, por motivos profesionales reside en Moscú, y vive a caballo entre esta ciudad y su Cieza natal. Autor de varios relatos y cuentos cortos, ésta es su primera novela.