Los años transcurridos desde la promulgación de la Ley de Venta a Plazos han visto aparecer obras de diversa índole sobre la misma. Mientras algunas analizan uno por uno sus artículos, otras se han centrado en concretos aspectos, muy variados entre sí, que plantea el régimen legal, como la naturaleza de la reserva de dominio, la relación de la LVP con la normativa del crédito al consumo, o la efectividad de las garantías legales en un contexto concursal. El trabajo que ahora empieza se sitúa en esta segunda línea, pues tiene por objeto dos de estos concretos aspectos examinados por la doctrina. La primera parte del libro estudia la fuerza de obligar de la ley, con el fin de determinar si tiene naturaleza cogente o su aplicación depende de la voluntad de las partes; cuestión que se ha revelado más rica de lo que pudiera pensarse, y cuya respuesta se ve facilitada por la perspectiva que ofrece el paso del tiempo. En la segunda parte, se sitúa la ley especial dentro del Derecho privado, determinando el carácter de los contratos regulados, es decir, si son compraventas mercantiles o civiles. Ambas cuestiones se plantearon ya con la primera norma sobre la materia, lo que hace necesario su análisis junto con el de la ley vigente.