«Niki es un libro sobrio. Su signo es la severidad; la carga de emoción la proporciona el desasosiego de la perra. En el arte de manejar la aproximación y el alejamiento de esas dos líneas paralelas: emoción y severidad, reside la perfección de la novela. Ese es el gran triunfo de Déry.» Sergio Pitol INTRODUCCIÓN DE GEORGE SZIRTES La historia comienza así: «El perro -no le demos nombre todavía- se introdujo en la casa de los Ancsa en la primavera de 1948». Los Ancsa son una pareja madura que reside a las afueras de Budapest, en una Hungría arruinada que despierta de la pesadilla de la segunda guerra mundial. El nuevo gobierno comunista promete poner todo en orden, y el señor Ancsa, un modesto ingeniero, desea comenzar a trabajar en la construcción del futuro de su país para poder así olvidar el pasado. Este proyecto lo mantiene tan ocupado que parece no tener tiempo para cuidar de Niki, que se encuentra a punto de parir su primera camada. Pasado poco tiempo, los Ancsa deben mudarse a la ciudad y llevan consigo a Niki. Un día el señor Ancsa desaparece sin dejar rastro a causa de la represión política, y durante cinco años Niki y la señora Ancsa sólo se tendrán a sí mismas para hacerse compañía frente a la ausencia, el miedo, y el constante desafío para sobrevivir. La historia de Niki, una perra común y corriente, y la de los Ancsa, una pareja no menos común, es una parábola extraordinaria, conmovedora sobre el cariño y la fuerza del amor. Su autor, Tibor Déry, fue condenado, tras la represión soviética, a nueve años de prisión. Escritores de todo el mundo, entre ellos Albert Camus, Jean-Paul Sartre, E. M. Forster, Rebecca West y Alberto Moravia, se unieron en su defensa.