Ricardo Defarges es un poeta perteneciente a la generación de 1950 (los poetas que publicaron por primera vez al principio de los años sesenta suelen incluirse en la generación de 1950, para que no haya confusión con los «novísimos»; la fecha de nacimiento -1933- es otro factor determinante). La poesía de Defarges se puede dividir en dos etapas: la juventud, de carácter escueto, lo que se refleja en la versificación adoptada; se trata de poemas sencillos, en que el desarrollo adquiere en cierto modo forma de canción, que expresa un dolor contenido y sobrio; y la etapa de madurez, con poemas más complejos, apareciendo el «culturalismo» y hasta el poema filosófico. Hay más variedad de temas. Aparece, tras el pesimismo innato en Defarges, el amor humano. Esta poesía es una queja, que procura acoplarse con la sobriedad y el silencio. El lenguaje trata de ser claro, con la diafanidad inherente a la soledad. Dos de los poetas preferidos por el autor: Verlaine y A. E. Housman.