En la sociedad occidental actual el hombre vive inmerso en un universo de artefactos y él mismo se ha convertido en artefacto y vive como tal. Lo natural es ahora lo considerado artificial para un universo anterior al advenimiento de la praxis científico-técnica. Manera de vivir entre y como artefacto que intenta imponer, además, al resto del planeta. Desde este punto de partida, en el libro se intenta responder a la pregunta ¿cómo se ha llegado hasta aquí? Y se encuentra que uno de los factores clave es haber adoptado como praxis esencial la científico-técnica. Una praxis o Hacer que sólo se puede dar en el interior de un marco que la hace factible; marco de creencias que se acoge bajo la Metáfora-raíz del Mecanicismo, de una determinada y auténtica visión global de la physis. En el libro se analiza esta metáfora que se apoya en dos principios constitutivos: aceptar que todo es materia en movimiento y que sólo se puede estudiar y explicar, y con ello predecir, mediante el Hacer matemático. Dos creencias que se incardinan con el manejo de dos instrumentos esenciales: la modelización y el experimento que, a su vez, exigen del aporte técnico industrial asociado. Un análisis en el que subyace, implícita, otra pregunta: ¿hay otras maneras de vivir la vida que no sea la de vivirla como un artefacto más?