Aritmética ilustrada no es un libro de matemáticas, sino uno de ilustraciones sobre problemas matemáticos extraídos de viejos libros de texto publicados a lo largo de casi 100 años, desde 1860 a 1957, que presenta una muy cuidada edición. Juan Berrio se sirve de su elegante trazo para acercarse a ellos como a un ejercicio, un divertimento o un reto. Hay en él anécdotas banales, pero también pequeños dramas cotidianos, auténticas historias de un tiempo ya pasado que ha considerado que merecían la pena ser dibujadas, utilizando incluso la misma tinta china con la que aquellos alumnos escribían. Para la selección de los ejercicios -contiene 88 problemas de aritmética y álgebra ilustrados agrupados en ocho temas- Berrio ha tenido en cuenta, más que el planteamiento puramente matemático, lo curioso de cada enunciado y las peculiaridades y las costumbres de las distintas épocas en que fueron redactados. Aficionado desde pequeño a contar historias y a las matemáticas -no en vano eran éstas, junto con el dibujo, su asignatura favorita en el colegio, donde algunas de sus mejores obras quedaron en los márgenes de los libros y en la madera de los pupitres-, el autor ha desplegado con éxito todos sus recursos como ilustrador para resolver el dibujo. Empezando por solucionar el problema y obtener un resultado que queda, en ocasiones, reflejado en la propia ilustración. ""Libro para leer, ver, pensar, disfrutar y resolver"". Gustavo Puerta. Educación y Biblioteca