El presente libro es la culminación de los muchos años de trabajo que sus autores han dedicado a desarrollar métodos de evaluación e intervención familiar. Guiados por su firme creencia en el método esperimental, se han planteado, su experiencia terapéutica como un proyecto de investigación, y han convertido a terapeutas y familias en compañeros de una gran aventura científica. La observación clave del texto, en este sentido, es que a cada familia le convienen unos estilos y unas estrategias terapéuticas diferentes, con lo cual, y en consecuencia, la evaluación se converte en algo esencial. A partir de las Escalas de Interacción de Beavers, se puede evaluar a las familias, así, en dos dimensiones cruciales -la competencia y el estilo-, y determinar en cuál de los nueve grupos principales puede encuadrarse cada una de ellas. Pero no sólo eso, pues esta primera operación sentará también las bases para el tratamiento y la intervención, consecuencias naturales de la evaluación y, lo que es más importante, portadoras de actitudes y estrategias específicas que pueden resultar enormemente beneficiosas para distintos grupos familiares.