Este libro ofrece por primera vez una visión de conjunto, en el contexto peninsular, de la interacción entre la literatura y los medios de comunicación social desde una perspectiva diacrónica pareja a las innovaciones que ha venido ofreciendo y continúa haciendo la Revolución industrial en sus diferentes fases. Esa interacción se define, principalmente, desde la sinergia entre la literatura y los sucesivos medios de comunicación sociales que parten de la prensa y continúan con la fotografía, la radio, el cine, la televisión y las denominadas eufemísticamente nuevas tecnologías entre los cuales se da un proceso de cooperación cuyo efecto es superior a la suma de los efectos individuales, además de una recíproca interferencia que ha generado unos resultados muy particulares, definidos y delimitados, como se señala en los capítulos del libro, desde el siglo XVIII hasta la actualidad, a los que cada uno de ellos por separado, literatura y medios, muy posiblemente no hubiesen llegado. Por supuesto que está también implícito el papel de los soportes de la literatura: desde la oralidad, pasando por la escritura y, llegados a la modernidad, los nuevos soportes tecnológicos que han permitido, y siguen haciéndolo, nuevas formas de comunicación. Hoy en día el arte, la arquitectura, los mass media..., participan de esa concepción sinérgica, sin lugar a dudas. Se han roto los límites entre los géneros literarios y entre estos y los periodísticos; se han destruido encorsetamientos que han permitido la libre circulación de lenguajes, símbolos, estructuras, etc., pues gracias a la cooperación mencionada se han logrado nuevos e innovadores discursos.