La financiación de la política, esto es, del proceso políticoprotagonizado por los partidos, es desde hace muchos años una cuestión problemática en las democracias occidentales. La profesionalizaciónde la política, la transformación de las elecciones en grandesoperaciones mediáticas y propagandísticas que conllevan enormesgastos, así como el mantenimiento por los partidos de miles de sedes y miles de empleados retribuidos, han dado lugar a unas exigencias definanciación que resultan incontenibles.El autor cree que esta financiación es uno de los parámetros queconfigura el sistema político de un país, tan importante como la forma de Estado o el sistema electoral. Cree también que ha desbordado enlos últimos tiempos toda medida razonable, según se desprende de lascifras que ofrece en esta publicación.Por todo ello entiende que hay que limitar la financiación públicaexcesiva que hoy rige en España y que desencadena consecuenciasperversas sobre la vida política española. Es un tema en el que hayque cortar por lo sano si queremos de verdad promover la regeneraciónde la democracia española.Gaspar Ariño es un Letrado de dilatada carrera, cuya actividad haabarcado no solo la consultoría y el ejercicio libre de la abogacía,sino también la política y el periodismo. Ha ejercido como catedrático de Derecho Administrativo en las Universidades de La Laguna,Barcelona, Valladolid y la Universidad Autónoma de Madrid. Es autor de 25 libros y ha colaborado en múltiples publicaciones. Cuenta en suhaber con el Premio de la Energía otorgado por el Club Español de laEnergía y el Premio Luca de Tena. Además, ha desarrollado su actividad política como diputado al Congreso durante la 4.ª Legislatura y hasido miembro del Consejo Consultivo de Privatizaciones.