Compuesto con motivo de una conferencia pronunciada en Turín en 1880, este texto del autor del conocidísimo «De los Apeninos a los Andes» nos sumerge con maestría en las múltiples y contradictorias repercusiones que el vino produce en la mente y el comportamiento de los bebedores. De Amicis detalla con precisión los efectos psicológicos del vino, que van desde la euforia compartida en el placer de la convivialidad, cuando «la mente ya no sabe si da o recibe», hasta el sentimiento de plenitud y poder de todas nuestras facultades (cuando se eleva la conversación «hacia los grandes hombres..., hacia los grandes problemas sociales»), hasta el triunfo de la inspiración y, finalmente, del exceso. Taciturno, locuaz, cariñoso, apasionado..., el autor explora las simbiosis del vino con la mente humana, sus alteraciones, sus emociones, sus secuelas. En la última parte de la obra, se interesa De Amicis por las repercusiones, tanto personales como sociales, que genera el consumo del vino, cuando «el enemigo se infiltra y crece gota a gota, sorbo a sorbo».