La obra es un riguroso análisis desde el punto de vista jurídico-constitucional de la Ley Catalana de Consultas Populares de 2014. El estudio trata de resaltar las diferencias de la ley con otros textos aprobados o tramitados con anterioridad sobre la materia en Cataluña lo que evidencia la traducción en normas jurídicas de un paulatino proceso de deriva soberanista al margen de las previsiones constitucionales y de la doctrina del Tribunal Constitucional sobre los conceptos de referéndum y de consultas populares. El libro trata de demostrar que la actual regulación sobre el tema, potencialmente utilizada para formalizar deseos independentistas, no sigue la característica histórica del nacionalismo catalán del acuerdo o negociación sino que demuestra un propósito de separarse de las reglas del consenso constitucional de 1978 lo que provoca la inconstitucionalidad clara de algunos de sus artículos.