La pelea entre los criminales y la policía, las leyes y la justicia es tan antigua como el mundo. Pero existe otro tribunal: el del periodismo, que, desde siempre, registro los crímenes más memorables. Especialistas en la llamada crónica roja, y sin embargo angélicos, Javier Sinay y Osvaldo Aguirre liberaron de la prisión de los archivos algunos de los textos policiales más recordados de los últimos 150 años en la Argentina. Cuando era un chico y ya soñaba con ser periodista, seguí con devoción (¿y con morbo, tal vez?) el día a día de la investigación sobre el asesinato de Alcira Methyger, descuartizada por su novio, un tal Burgos. Este libro -vaya viaje- me vuelve a instalar en aquellos días; para mí iniciáticos. Este y otros muchos casos, resueltos o no, pero que en su momento tuvieron la condición de dejar insomne a medio país fueron contados por periodistas admirables e integran esta edición. ¡Extra! No es sólo un llamado de atención para poner a prueba la sensibilidad colectiva: también confirma que algo de lo maligno está en cada uno de nosotros y en la condición humana.