Cuando eres joven y descubres que las cosas no serán como te dijeron que serían, Barcelona, con su feroz especulación inmobiliaria, sus bandas de mafiosillos en pie de guerra, su hedonismo y su compromiso descafeinado, es una ciudad tan buena como cualquier otra para arrastrar tu asco. Pero, ¿por qué arrastrarse si uno puede saltar? Saltar por encima de todo, de los obstáculos externos y de los otros, de eso se trata la vida para Luna, Raúl y Edu, tres amigos diferentes pero unidos por el Parkour. Las caídas, por supuesto, son inevitables: un paso en falso, un fallo en el cálculo de la distancia y de repente tus huesos van a dar al más urbano de los infiernos.