Mezcla de Historia de España, Historia del Derecho y autobiografía, esta obra quedó inconclusa por la muerte de su autor. En ella, a través del diálogo entre dos personajes vinculados al mundo académico (un español en los años finales de su vida, exalumno y profesor de la Universidad de Valladolid -el propio Rodríguez Camaleño- y un observador europeo) se van abordando temas como, por ejemplo, la oscilación entre el liberalismo y el absolutismo o un asunto aún polémico: el grado de respaldo popular de la Revolución española de 1808 ante la invasión de España por los franceses. Luis Rodríguez desarrolló una intensa vida pública tanto en el aula (como catedrático), tribunales, magistratura y política (por ejemplo como diputado por la provincia de Santander)... basada en el gusto por el trabajo bien hecho y en sus ideales liberales.